dirigiendo un vinyasa

dirigiendo un vinyasa
En Mandiram Urquinaona

sábado, 30 de enero de 2021

Un poco de mi

 Os quiero hablar un poco de mí, antes de pasar a tema más complejo del yoga. Primero empezaría por donde el todo empezó, ¿Cómo es que yo cogí  este camino con el yoga?? Pues primero de todos quiero decir vos que si no estuviera el yoga muy probablemente estaría en una situación física muy mala además de crisis depresiva, esta es una otra verdad de mí. Os digo eso porque quiero que tenéis presente que no soy la persona perfecta sin nada de malo y sin un pasado complejos. Bien, diciendo eso tampoco quiero hablar mucho  de esto, porque pienso que no es donde yo quiero llegar, además sería confuso y demasiado personal. Tenía 19 añitos, cuando, con una amiga íbamos en una clase de yoga, era por la tarde, una vez o dos por semana dentro en una escuela primaria o secundaria, bueno tampoco es importante eso, lo cierto es que descubrí algo maravilloso en el cual entregarme en el profundo con mi misma y mi cuerpo. La dos errábamos muy animada en realidad, yo y esa mía gran amiga, con la cual compartir algo juntas, esa fue en un principio la intención y proseguí por dos añito más, hasta que  la maestra no repitió esas clases. Cuando terminaron las clases lo cierto es que yo en mis pequeños momento intentaba a conectar con lo aprendido hasta que me fue posible. Un año después me fui a vivir juntos con mi pareja en una casa ocupa, esas  casas eran de la iglesia romana, al lado nuestro vivían otras familias, todas esas casas eran unifamiliar con jardín propio, una maravilla, si la volvía arreglar por tu cuenta. Nosotros hicimos pequeño arreglo, no llegamos a mucho, al cabo de dos año nuestra relación se rompió, él se fue y yo también. Quedo con estos momentos un instante más para poder hablar de alguien que de vez en cuando nos hacía visita, entre otra tantas personas que pasaron por allí a visitarnos y quedar con nosotros a vivir momento muy intenso. Era un periodo de fiesta, activismo y viajes. Nuestra casa además de vivir con mi pareja vivía un hombre más mayor con el cual en aquel periodo mi pareja trabajaba juntos, yo algunos años más adelante, errábamos todos artista, era el periodo de la droga psicadelica y del porro, no lo voy a negar, es un punto importante también para entender algo de mí. Y entre las visitas que recibíamos casi todos los días, había un hombre también más mayor de mí y mi novio, recordaré siempre la primera vez que nos conocimos yo y él. Entró un día, de repente da la puerta, yo en aquel momento estaba sola en casa, el vino a mí diciéndome que buscaba a mi novio, como le dije que no estaba, se quedó igual, yo no confié por un momento(tampoco era muy hippy para que entraran las gentes de repente y darle todas mi amistad y cariño) él lo notó. Pero hablando con él al cabo de poco empezamos ser amigo. Quiero decir que el guro(maestro en sánscrito) no siempre vienen da la India y de Himalaya, a veces son persona occidental que en algún momento de su vida se entregaron mucho a la ciencia del yoga y a su filosofía que nunca y por nada dejarían. Pues esto es mi maestro, tenía un nombre en sánscrito, pero vino a mí con el nombre de que todos allí  conocían, Gatto( o Máximo). Era un hombre con un pasado muy fuerte, lo tenía el rasgo en su cara, pero aun así tenía una sonrisa inigualable, su rostro se iluminaba, era una buena persona, me aportó mucho más el que cualquier novio que tenía después. Nuestra amistad duró 7 años más, hasta que yo me fui y no volví a verlo más. Con él meditaba, con él aprendí a vivir sin tener miedo y hacer frente a esos miedos cada vez que pasaran por mí. Siempre me acordaré, cuando tenía un problema él me repetía yoga Ari, por cualquier cosa yoga. Él tenía un cuerpo precioso, era superágil, ni mi novio de aquel tiempo tenía un cuerpo tan bonito así. A los 37 volví a mi práctica, en esto tengo que dar la gracias a él por recordarme del yoga en cada instante y a mis nuevas amigas que en aquel entonces eran asidua del yoga. En el 2015 me decidí de coger la formación para poder enseñar el yoga a lo demás, aquí estoy. Empecé a enseñar con algunas sustituciones como obtuve el diploma, hice alguna formación más para perfeccionar, alimentar mi curiosidad en la práctica y aportar algo más en mis clases. Después de la pandemia me quedé con dos clases mías, tengo mis tres alumnas fieles otras van y vienen, busco otras alumnxs más para poder crear más cosas en futuro. Pero no lo niego estoy muy motivada y positiva y tengo claro que la vida es en continuo movimiento y siempre las cosas van cambiando. 

La vida misma cambia nunca permanece, somos como olas en continuo movimiento..🙏



sábado, 23 de enero de 2021

Hatha yoga en ananda yoga

Desde que empezó el nuevo año me propuse  nuevos rectos, novedad en mi práctica y enseñanza. Tengo habitualmente dos clases una el martes con la que estuve haciendo hatha, restaurativo o yoga suave y el jueves con la que siempre practiqué el vinyasa, son práctica muy diferente entre ellas, pero ambas nos piden concentraciones y nos llevan a la misma meta, la meditación.
Lo que a veces o en muchos casos pueden pasar es la dificulta en un estado de atención y una presencia firme, hay una palabra que se suele decir( el aquí y ahora) para que el alumno pueda entender con mayor percepción. Ese estado de presencia es lo que nos ayudará a estar más firme en cada postura así poder sentir con mayor facilidad como responde nuestro cuerpo en bien y en mal(bienestar o fastidio en zona concreta o no poder quedar por mucho tiempo en esta asana). Muchos practicantes sabes muy bien que el cuerpo al dar señal es algo positivo, que podemos fácilmente adaptar cambiando algunas alineaciones del cuerpo o con algunas modificaciones de la postura para poder quedar en la misma sin tener que dejar de hacerla en aquel instante. El cuerpo nos da señales para que podemos profundizar o cambiar algo que no va, con el tiempo a corto o largo plazo cambiará y ya todos lo que hemos probado en un principio ya no suelen pasar. Lo único y verdadero inconveniente es cuando dejamos de practicar por un tiempo, eso ya lo iremos notando al volver de la práctica, suele pasar que el cuerpo necesite da parte nuestra moderación y paciencia para que pueda recuperar esos patrones nuevos que había adquirido. Mi dedicación me llevó aprobar todos esto y llevarlo a la esterilla con mis alumnas. Es podido ver y sentir todos estos proceso, pero aun así hay una de esa, dificulta que implica más que el cuerpo y es nuestra mente. Si la mente  nos se hace pesante el cuerpo mismo lo será, si está estresada el cuerpo le perjudicará, si tienes muchos pensamientos agitados eso no nos permitirán de quedar en la asana. Todos y más de esto hace que no podremos trabajar bien ese día o cada vez que estamos en esta o otra situación. Una alumna me dijo: No puedo quedar mucho en la asana a mi me viene mejor un vinyasa para poder tranquilizar mi mente. Según Yogananda( guro del kriya yoga y hatha) dijo claramente que la mente es la que más afecta, para poder practicar nuestras asana. El yogui perceptivxs descubre que el cuerpo y la mente están conectados. El cuerpo y la mente se influyen entre sí en un instante. El yoga nos ayuda a trabajar desde estas dos parte intentando a unificarla con una práctica intensa y dedicatoria. Es necesario por esto ser constante, buscar el lugar y la hora por hacerlo( si eres principiante o no es siempre mejor encontrar un/a buen/a maestra que te pueda enseñar y ayudar con alineación corporal y intensificar la práctica). El problema que puede generar nuestra mente a veces y en la gran mayoría son problemas muy evidentes que nos implican por esto buscar una solución, yo por una sana casualidad me sumergí a la práctica de ananda yoga y me dio alguna respuesta al problema que tenía esa mía alumna. Así que empecé el nuevo año con la clase de los martes con la práctica de ananda yoga poniendo a cada asana una afirmación además de un pranayama en movimiento(Dirgha Pranayama) antes de empezar con el surya namaskar(saludo al sol) y con la asana. Son poco los días para saber los progreso, pero estoy convencida de lo bueno resultado, solo hay que esperar, cultivar la paciencia es un acto de amor.💜💗🙏

Ritual del Solsticio de verano: “Nuestro Fuego, Nuestras Aguas”.

  ⇢Para obtener mayor información sobre este  Ritual, puedes rellenar este formulario aquí abajo⇣   https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQ...